Acerca de Convirtiendo Lágrimas en Sonrisas
Vivian Pellas sabe que cada minuto es valioso. Su historia es la de una vida “pasada por el fuego” y con su inmensa fe, no solo supo vencer a la muerte, sino que ahora salva vidas y alivia el sufrimiento de muchos niños en Nicaragua, Centroamérica.
Aún con parte de su cuerpo en carne viva y con múltiples fracturas, balbuceo: “voy a construir una unidad para los niños quemados de Nicaragua, voy a construir una unidad par los niños quemados”, no se quejaba, trataba de encontrar el plan divino que Dios le había designado desde su creación. Unos escuchan el llamado y actúan, otros oyen, y divagan en cosas efímeras.